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La Prof. Anabella González fue reconocida por Argentina junto a colegas de otros 15 países de la región por las estrategias implementadas en respuesta a la pandemia durante 2020.  ¡Felicitaciones!

“Docentes que Innovan” reconoció la creatividad, la innovación y las estrategias de comunicación con las familias implementadas en respuesta a la crisis del COVID en 2020; y su entrega para garantizar el derecho a aprender.  

La Red Latinoamericana de Organizaciones de la Sociedad Civil por la Educación (REDUCA) impulsó en 16 países latinoamericanos el “Reconocimiento de Prácticas Innovadoras REDUCA 2020 en respuesta a la crisis del COVID-19”. Lo hizo “como oportunidad para compartir iniciativas de éxito que realizan las y los docentes latinoamericanos y que logran una educación integral de calidad como elemento crucial del desarrollo humano de millones de niños y jóvenes de nuestros países”. Reduca es una red de organizaciones de la sociedad civil en América Latina que trabajan por la garantía de una Educación de calidad para todos en sus países. 

El año 2020 fue un año de grandes retos para la educación debido al cierre de las escuelas en la mayoría de los países de la región latinoamericana. Por ese motivo las y los docentes de los centros educativos han debido buscar mecanismos y metodologías adecuadas para continuar apoyando a los estudiantes con su aprendizaje desde el hogar. 

La profesora Anabella junto a su equipo, durante la pandemia Covid – 19 buscó que escuela y familia trabajaran incansablemente para asegurar la continuidad pedagógica desde tres canales de comunicación (Grupos de WhatsApp Institucionales, Sitio de Google y cuadernillos de actividades impresos) asegurando también la vinculación del 100% de los niños y niñas con la Escuela. La propuesta integraba la formación  a las familias para organizarse con las tareas, a compartir el único celular que tienen disponible en casa, a destinar tiempo y espacio para llevar adelante la actividad escolar.

Trabajo en equipo

En este sentido, Anabella explicó: “Un aspecto clave para el logro de nuestros propósitos es el trabajo en equipo. Casi todo lo que hacemos es posible con el “otro” y allí es donde las acciones individuales toman fuerza. Cada una de mis acciones no serían efectivas sin un trabajo colaborativo, en principio con el equipo de  conducción Institucional, con mis colegas (vicedirectora y secretaria), con cada uno de los docentes, equipos técnicos, niños y familias… con todos y cada uno de ellos hacemos que el proyecto se concrete desde una perspectiva de mejora continua”. 

Y agregó: “Desde el lugar en el que me desempeño, el Colegio Madre Teresa, la oportunidad de desarrollo profesional es constante ya que se trabaja allí bajo la premisa de una cultura de superación y reflexión sobre la práctica continua orientada a la toma de decisiones estratégicas que genere una educación de calidad en contexto de pobreza”.

Respecto del reconocimiento, agradeció: “Gracias por este reconocimiento, que aunque se manifiesta individual, para mí es un reconocimiento hacia el equipo. Gracias por creer en el rol transformador de la escuela y por trabajar de manera comprometida con la educación. Sin dudas: aún podemos con lo que sucede”.

Por su parte, Marcela de la Fuente, directora ejecutiva del Colegio Madre Teresa, celebró el reconocimiento y mencionó al respecto: “Cada dimensión en el abordaje de la escolaridad de las niñas y niños conlleva un desafío que nos motiva a formarnos, construir con otros y plantear un plan con vista a validar procesos y resultados. En esto el abordaje familiar, constituye un pilar de la propuesta, y en este sentido Anabella en un trabajo minucioso de escucha, trabajo colaborativo con el equipo y sobre todo confiando en el potencial que tienen los adultos a cargo de los alumnos cuando se los considera valiosos y necesarios en la construcción de la trayectoria escolar de sus niños, definió  estrategias que permitieron la permanencia del 100% de nuestra matrícula. ¡¡Felicitaciones!!”

El 1 de marzo recibimos a los alumnos de Nivel Inicial y Primaria. El 8 de marzo empezó el ciclo lectivo para Secundaria.

Acompañados por sus padres, como todos los años, los alumnos volvieron a las aulas para iniciar un nuevo ciclo lectivo. También como todos los años, sus docentes los esperaron llenos de entusiasmo y con sus aulas listas para ofrecer el mejor entorno educativo. 

También hubo un arduo trabajo pedagógico previo, que este año demandó adicionalmente  la adaptación de las estrategias pedagógicas al nuevo escenario de semipresencialidad y específicamente enfocado al perfil de nuestros alumnos. 

Con una modalidad de semipresencialidad, hasta 15 alumnos en el aula por turno y horarios escalonados de ingresos y egresos, los alumnos ya están aprendiendo. El trabajo en sus casas comprende actividades vinculadas a la propuesta del aula presencial, recibiendo en la escuela la orientación del docente.  

El Colegio se preparó ediliciamente para la permanencia en el nuevo escenario de pandemia, con estrictos protocolos sanitarios que cumplimos férreamente para cuidarnos todos: los niños y los adultos. 

Según las normativas vigentes, nuestro comedor aún no puede funcionar. Por eso, para garantizar nuestra propuesta de asistencia nutricional, repetimos la entrega quincenal de bolsones de alimentos a cada familia que implementamos en 2020. 

Con toda la comunidad detrás del objetivo de transitar este año tan desafiante con el foco en garantizar, como siempre, aprendizajes significativos para cada uno de ellos. 

La emoción por el nuevo comienzo, la determinación por enseñar y el cariño están intactos. ¡La educación volvió a vibrar en cada docente, en cada niño y en cada aula! 

El ciclo lectivo 2021 plantea nuevos desafíos para todos los actores de nuestra comunidad. Será otro año de esfuerzo compartido entre todos con el objetivo de #SostenerLaEducación.